El tema tabú que hace reír a los niños
Cuando trabajas con niños, las palabras que más gracia les hace son las relacionadas con el sexo o con algunas partes de su cuerpo. Decir simplemente «culo» es motivo de carcajadas y caras coloradas.
De éste hecho aparentemente inofensivo, cabe hacer una reflexión y es la de: ¿Cómo viven los niños y los adolescentes la sexualidad y el reconocimiento de su propio cuerpo que va cambiando?
¿Qué percepción tienen de ellos mismos y de las relaciones amorosas de sus padres o de otras personas que se besan en la calle?
¿Qué manera tienen de percibir todos éstos mensajes y quién los analiza con ellos a éste respecto?
Entendemos que son sus propios padres, pero no siempre es así ni hay que darlo por hecho. Los padres también se han educado con éstos tabús.
En un taller de risoterapia para sexo de primaria, en una de las dinámicas «me llamo y me pica» se partían de la risa cuando alguno se atrevía a decir «me pica el pene» o «me pica la vulva», casi diría que los que decían, lo hacían en un modo rebelde cómo aquél que dice «mira que valiente soy, ¿oyes lo que digo?» A algunos cuando les tocaba repetir lo que les picaba a sus compañeros, sentían vergüenza al decir éstas palabras.
Esto me hace pensar que la sexualidad todavía se vive y se percibe cómo un tema tabú y no hay nada más importante que hablar sin tapujos sobre ello, con las personas de confianza. Debemos avanzar hacia una mejor liberación y aceptación de algo tan natural como es la sexualidad, que permite reproducirnos, que realizan todos los animales y que además, genera un placer por el cuál no debemos avergonzarnos.
Además, en éstos últimos tiempos han salido al mercado infinidad de juguetes eróticos, de artículos para la higiene femenina durante la menstruación diferentes a los tradicionales, y los jóvenes quizá tengan dudas al respecto…
Talleres para niños y adolescentes en colegios
Trabajar la sexualidad con niños y adolescentes
Nuestros cuerpos
La relación con el propio sexo
Tratar el género, la igualdad; las palabras masculino, femenino y sus connotaciones.
La diferencia sexual
A lo que expresamos y queremos expresar al hablar, más allá de lo políticamente corrrecto.
Dar significado al propio sexo
Descripción individual de una experiencia de cada participante de algún hecho o situación vivida en la que resulte significativo ser hombre o ser mujer.
El lenguaje masculino/femenino
El lenguaje, la manera de expresar lo que sentimos o queremos expresar al hablar, más allá de lo políticamente correcto.
Nombrar la sexualidad
Las palabras que se utitilizan en referencia a los cuerpos sexuados
Las palabras que se utilizan habitualmente para hablar de sexualidad corresponden al modelo sexual impuesto por el patriarcado
Las palabras que se utilizan en cuanto a los cuerpos sexuados
Generalmente el lenguaje se reduce a la relaciones coitales heterosexuales que carecen de afectividad y tienen determinadas características a trabajar con los jóvenes.
Problemas que generan los lenguajes que se utilizan para hablar de sexualidad
El primer problema es el de «lo que no se habla», es decir, lo que queda al margen del lenguaje: la sexualidad en la infancia, la sexualidad en la vejez, la expresión de afectos, el desarrollo del cuerpo, los deseos que se esconden…
Nuevo lenguaje para hablar de sexualidad
Palabras que hablen también de lo interno y de los procesos, de las emociones, del enamoramiento, del desamor, del descubrimiento de un deseo homosexual, de la vivencia de los cambios del cuerpo…
Relacionarte contigo mismo
Amarse
Autoestima, autoconcepto, autoafirmación
Las relaciones con otros
Somos seres sociales, necesitamos relacionarnos, comunicarnos afectivamente y establecer vínculos. La forma de relacionarnos ha cambiado significativamente en los últimos años con las redes sociales, que es necesario trabajar con los jóvenes
Poner palabras al amor
Hablar sobre experiencias amorosas
Poner palabras a lo que ha significado el amor en nuestras vidas es un ejercicio educativo
Lo real ante la idealización
Ideales prefabricados, películas, amor en las redes, comentarios con corazoncitos, influencers felices con sus parejas con el fondo de la Torre Eiffel….
El enganche, la obsesión
Tratar el mito de cuánto más celos, más amor… Valorar la idea de amor romántico; relaciones de ensueño que han terminado por ser asfixiantes, de control y de maltrato.
Sometimiento y apertura al otro
¿Dejarse influir o transformarse por la pareja es un indicador de sometimiento?
Los conflictos
La relación con la diferencia de la otra con el otro, enriquece y abre perspectivas. Ahora bien puede ser que a veces surgen conflictos, nudos y obstáculos.
La libertad en las relaciones amorosas
Diferencia sexual y libertad
Nada en sí (una pareja, la moda, las redes sociales…) nos quita o nos da la libertad. Es el modo cómo me relaciona con esa persona, esa actividad, donde reside la posibilidad de mi libertad.
Atender a lo diferente en la sexualidad
Los hombres y las mujeres tenemos maneras diferentes de vivir la experiencia sexual.
Preguntarse y escuchar
La libertad de cada mujer y cada hombre se teje y se desteje en las relaciones que sostiene, por eso es tan importante atender al vínculo, a cómo concibo al a otra o al otro y en qué medida vivo esa relación de modo libre.
Atreverse a enseñar y aprender
Hemos crecido con muchas historias de amor, algunos cuentos y también ciertos mito. Poco a poco vamos diferenciando qué es lo que tiene que ver conmigo, con las personas cercanas que he conocido y cómo se han ido colando las narraciones románticas de princesas y príncipes, de héroes masculinos que idealizan.
Dar lugar a las palabras en los conflictos
Cuando en una relación amorosa los deseos son coincidentes, sentimos el placer de pode compartir y la libertad tiene mucho que ver con la sensación de felicidad. Otras veces nos estancamos y prima el deseo de liberarme de aquello que no me gusta, con lo que no estoy de acuerdo o simplemente no quiero en mi vida y con ello la relación termina.
El amor y la sexualidad en el contexto educativo
La sexualidad desde su práctica educativa
Con éstos temas, se puede tratar cómo se cuela la violencia en la sexualidad, un tema recurrente y en el punto de mira. La educación es la base de una sociedad y es de la única forma que podemos mejorarla y transformarla.
A nuestro modo de entender es importante:
- Atender al qué y al cómo en las relaciones educativas
- Hacer educación sexual
- Aprender a nombrar y aprender a decirse la multitud de palabras y expresiones que nos ayudan a nombrar lo que nos rodea y también nuestros propios cuerpos, a expresar y entender lo que nos pasa, a relacionarnos con otras personas.
- Facilitar relaciones y espacios donde expresar, aprender, nombrar, experimentar…
- Partir de tí: quién eres, dónde estás y hasta dónde llegas (conocer los propios límites)